En esta tercera y última entrega hablaremos de la fuga energética de manera emocional.
Te haz sentido enojada desde que te levantas hasta que te acuestas. Estas intolerante con todo y todos. Si es así, es porque estás teniendo un fuga en tu energía emocional.
En este asunto debes tener sumo cuidado y no tomarlo tan a la ligera, las distintas maneras de crear estas fugas en tu energía emocional pueden ser por personas tóxicas, que son las que como garrapatas energéticas, se chupan toda tu buena vibra, por la acumulacion de estres sin sentido, es decir, cuando no sabes delegar responsabilidades y quieres hacer todo o te piden hacerlo todo y no sabes decir NO. La ociosidad, aunque parezca algo raro de decir, también es parte de los factores que causan estas fugas. Es terrible tener energía pero nada que hacer, entonces la malgastes en cosas inútiles.
Comencemos por el principio. Las personas tóxica a tu alrededor. Esas personas que solo tiene palabras negativas para tus propuestas, las que siempre te reprochan o te dicen que lo que haces o pretendes hacer no funcionara o es ridiculo. Todos conocemos a una de estas personas, puede ser la pareja, amigos y hasta familiares. Estas personas se alimentan de la energía de los demás porque no pueden brillar con luz propia. también pueden ser aquellas quienes piensan que su vida y sus conflictos son los únicos que importan, te cita para charlas y no para de hablar de ella y cuando quieres decir algo sobre ti lo desestima. Debes tener sumo cuidado con ellas.
No pierdas energía valiosa en ese tipo de personas, ofrece tu ayuda pero no demasiada, guarda algo para ti y para tus propios conflictos. No asistas siempre que esta persona requiera de tu presencia o citala donde tu elijas esta vez. No le soluciones la vida, trata de que ella misma se de cuenta de lo que está haciendo bien o mal y que salga ella mejorar, tu a lo tuyo.
En el siguiente punto. El estrés siempre nos va a acompañar sobre todo si debemos rendir cuentas a un superior. Lo primero es organizarte, y no llenarte de cosas que otros pueden hacer por ti, delega algunas de las labore y ocúpate de las que requieran mayor atención.
Los jefes son jefes y no dejaran de presionar así que la opción es cambiar la actitud con la que recibas esa presión. Trata de cumplir con el trabajo requerido durante el tiempo que dure tu jornada diaria, evita llevarte trabajo extra a la casa y asi tendras tiempo de relajarte un momento, recargar baterías y comenzar al día siguiente con más ganas. Puedes levantarte más temprano para adelantar en la oficina.
A veces, debes aprender a decir NO, sobre todo si implica llenar tu tiempo de cosas y tareas que no tienen nada que ver con tu trabajo o tus tareas regulares. No por quedar bien o ayudar al amigo te llenes de cosas que solo te robaran la energía para poder invertirla en lo que realmente importa.
Y por último. Hay un dicho que dice "La ociosidad es la madre de todos los vicios" y es muy cierto. Si somos personas que todo el tiempo estamos activas y sobre estimuladas, llega un momento de esparcimiento y buscamos enseguida algo para hacer. Nos ponemos a escombrar la gaveta llena de papeles, organizamos el closet, nos hacemos manicura, hacemos citas para ir a almorzar, etc.
Aprovecha los pocos o muchos momentos que tienes para descansar para justamente eso, DESCANSAR, un cuerpo que no descansa lo suficiente o lo equivalente a la carga de actividades o trabajo que tienes. Es importante recargar la pila porque puede que de momento no sientas el peso de este error, pero no siempre tendras 20 años, y con el paso de estos años tu cuerpo lo resentirá.
Tu cuerpo es tu herramienta, es tu templo y es el único que tienes y tendrás. Debes respetar sus tiempos y sus momentos, hazle caso cuando te diga tengo hambre, tengo sed, tengo sueño, y cuando se encienda ese sexto sentido para advertirte que algo no está bien.
Aprende a escucharlo, aprende a cuidarlo, a respetarlo y a guardar tu energía para las cosas realmente importantes, para ti.
